Abro la puerta y huyo en medio de la noche; los faroles alumbran y centellean como raras flores que se marchitan en las calles destrozadas; y huyo avanzando sin lástima y sin alma; errante, deambulo sin sonrisa, y sin lástima.
Abro la puerta y cierro las nubes y las veo tiritar como antes de una tormenta y abro las veredas con surcos firmes que l desangran sin remedio y cierro un ciclo del universo y muerto el aullido de las piedras y rio.
Abro la puerta y es solo un sueño que se se dibuja sobre los papeles de un extraviado.
Y cierro las puertas y duermo.
1 comentario:
A mi me gustan tus fragmentos, es como un oasis de tranquilidad y pensamiento...pienso repetir te lo aseguro
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