martes, 18 de agosto de 2009

tiempo

qué sucederá, entonces, cuando ya no me queden fuerzas.
 
no quisiera saberlo.
 
ahora mismo camino erguido y mirando la luna (aunque no hay luna, solo la sucia bruma negra que cubre la cuidad desde un extremo al otro), pensando en, quizá, que mañana será un día diferente, en que ayer, quizá pudo ser un día mejor.
 
pero, qué más da.
 
distracciones, distracciones furiosas, distracciones sangrientas que se atraviesan por mi cuerpo.
 
una masa de pellejo, huesos, músculos y arterias desparramadas por la pista.
 
quién sabe cómo mirar hacía la luna.
 
aprendí de lo que sucederá, del incierto tiempo de nuestro tiempo.

 
qué sucederá, entonces.

2 comentarios:

Graciela Bello dijo...

Qué coincidencia. Tu post también se refiere al tiempo. Hay tantas formas de hablar sobre este tema!
Me alegra que no me hayas robado ningún dibujo. Espero que consigas tu reloj tan soñado muy pronto, aunque tal vez luego te lamentes.
Saludos.

fgiucich dijo...

Tal vez encuentres más fuerza para seguir adelante. Abrazos.