martes, 27 de abril de 2010

Ella

además

está tu silencio

y, además

no importa

ni el abismo que nos separa

ni esta tierra de fuego

ni la siguiente incierta noche,

importa un poco

mi corazón de pájaro

 

Había tomado por costumbre hablar sola; contaba historias bellas e indescifrables, ¿quién tendría tiempo de escucharle, o paciencia, o poca sangre en el rostro para insinuarle alguna razón para la cordura?. No, no había porque escucharla. Y lo que más asombro causaba era verla allí todos los días, a la misma hora, justo antes de las diez de la noche, cuando los Comunes se han refugiado en sus guaridas, Hella salía de su escondrijo: primero se asomaban sus dedos largos y huesudos, luego aparecían sus cabellos desordenados y sucios; de pronto, ella aparecía completa, su cuerpo curvado y sus piernas flaquísimas, entonces, desde detrás de su alborotada cabellera refulgían sus ojos; eran ojos bellísimos, azules como el cielo limpio en una bella tarde de verano. Y nadie comprendía de dónde provenían sus palabras.

Y le gritábamos.

¡Bruja!

Y le lanzábamos piedras y Hella, imperturbable solo nos regalaba una mirada celeste. Entonces abría la boca.
 
 

en este mundo

solo habitan

los responsables de la ira

y como la melodía de una lira,

se esparce mi alma

y se arrastra mi corazón
 
 
 

¡Bruja!, le gritábamos con ira. Con miedo.

Hella apenas si se detenía para observarnos, siempre con la mayor de las indiferencias, siempre con su mirada pura. Siempre hablando sola.

Le esperábamos hasta que nuestras madres nos llamabas. Había que ir a la escuela a la mañana siguiente.

Existen días en los que duermo pensando en Hella.

Hella por todas partes, su voz cavernosa y tosca, sus ojos purísimos como el sueño más hermoso que cualquiera podría recordar, y sus palabras.

Miles de palabras salían por su boca pues había tomado la costumbre de hablar sola.

2 comentarios:

Yahuan dijo...

En el fondo todos queremos ser Hella, mártires por hablar solos cuando queremos. En fin..., nunca lo sabremos, mientras vivimos una vida un tanto escombrosa, zigzagueante, intentando lo "mejor".

Un beso.

fgiucich dijo...

Personajes que vamos encontrando en el camino de la vida. Abrazos.